Estas máquinas facilitan en gran medida el trabajo de fregar el suelo y hacen que sea más rápido. Pero no se pueden usar en cualquier espacio; es necesario que las zonas de fregado estén más bien despejadas y que los residuos sólidos que se encuentren depositados en el suelo sean de un tamaño pequeño.
Digamos que las fregadoras con conductor a pie son adecuadas para superficies pequeñas o medianas, se debe tener en cuenta cómo son los pasillos en los cuales tiene que desempeñar su trabajo y establecer la anchura de fregado que fija la huella limpia.
Debe verse la superficie que hay que limpiar para su utilización y en función de eso, hay que elegir la fregadora automática más acorde, la carga de batería, los depósitos para el agua sucia y la limpia.
Otro asunto importante es elegir los productos de limpieza que se pueden utilizar en la fregadora, ya que no pueden formar mucha espuma para evitar manchar zócalos y paredes.
Las empresas fabricantes aportan multitud de detergentes, desde perfumados a higiénicos, pasando por decapantes o específicos para cada uno de los suelos existentes.
Incluso tenemos fregadoras automáticas que son más indicadas para unos lugares que otros, las hay más silenciosas ( por lo tanto mejores para hospitales), otras que por su funcionalidad actúan mejor en centros comerciales, las hay con baterías, que son más cómodas, y con cable.
Desde Limpiezas La Aurora recomendamos valorar las superficies que haya que limpiar y en función del espacio, obstáculos y características del suelo adquirir la que más convenga en relación calidad precio.
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